La novia era él

A petición popular de mi más ferviente seguidora, hoy hablaré de los Toy Boy.

El Toy Boy es una figura que me encanta. Yo en algún momento he querido ser Toy Boy.....pero con los años te das cuenta que es mejor tenerlos que serlo. Tener el poder y el control, incluso estilístico sobre alguien con la capacidades intelectuales de una guitarra puede ser muy divertido. O al menos eso parece.

Me querría centrar en dos ejemplos muy distintos de Toy Boy: Baptiste Giabiconi y Jason Preston.

El primero pertenece a ese ser llamado Karl Lagerfeld. Máster de la firma Chanel, fotógrafo de Vogue o cualquier revista que le pague, musculoca en sus años mozos e intimo de la Wintour.

Baptiste comienza su andadura allá por 2008 protagonizando la campaña de primavera-verano de Frankie Morello. Quien le iba a decir que después desfilaría en el Grand Palais... Pero eso vino después. Karl, que es muy lista y siempre esta ojo avizor de carne fresca(más fresca que Baptiste solo existe Justin Bieber, a quien también le dedicaré palabras más adelante), pues claro le echa el ojo a Baptiste y poco a poco lo va metiendo en todos los saraos y campañas que puede: Just Cavalli, Armani Jeans o Fendi.

Yo personalmente lo descubrí, y creo que la mayoría del gran público también, con esta sesión de fotos, en las que el Kaiser comienza su momento: A partir de ahora yo decidiré por ti. Como en aquel capitulo de Friends en el que Rachel nombra a Mónica su conciencia.

Ya vemos que el chico no tiene ningún problema en dejarse fotografía como al alemán se le antoje. Y si es desnudo mejor que mejor... A partir de aquí. Baptis, estaría en TODO lo que Lagerfeld pusiera su mano. Campañas, fotos, vacaciones, anuncios, cortos. Todo. Destronando así al pobre Brad Kroening(mi favorito sin duda) como el "favorito". Bien es cierto, que lo hemos visto en los dos últimos desfiles pero...como segundo, ni siquiera Inés de la Fressange tuvo tanto protagonismo como el chaperillo de diseñador.

Es una figura fascinante. Lo último es que también canta. Baptiste es un hombre renacentista 2.0 Lo mismo te saca una cabeza de León en un desfile, una chaquetilla de tweed que hubiese hecho estremecer a la misma Mademosielle, que te saca un disco euro dance con mas vocoder que Cher, Li-Lo y Britney post breakdown juntas. Objeto de culto sin duda. Su disco y él. Y diréis....pobre, el viejo lo humilla y le hace unas fotos extra chungas dignas del mayor pervertido y heels fetish del mundo...De eso nada. Anda que no es lista. Sabe que le queda el tiempo justo de cumplir la mayoría de edad pa que el alemán deje de hacerle caso. Y se aprovecha: casas, coches y un helicóptero para los momentos de urgencias. Quien se lo iba decir a él, que tras protagonizar su campaña de Frankie Morello iba a estar de vacas en St Tropezó con uno de los más poderosos e influyentes personajes del siglo?? No, no es tonta, amiga.

Y ahora otro tipo de Toy Boy. Los que juegan en la misma liga. Marc Jacobs y Jason Preston. Vale que ya no son novios. Y que el último maromo conocido de Marc es Lorenzo Martone, que solo por eso nombre yo ya saldría con él.

Esta pareja bien es cierto que no es tan divertida como la de Karl y Baptis, pero tiene su miga. Todo empieza cuando Marc se da cuenta de que todo es más fácil si, cuando tienes un talento limitadito y lo único que haces es mezclar texturas, prendas y estilos sin control, te dedicas a dar pequeños escándalos y labrarte una fama de enfant terrible. No al estilo de Gallianor, éste aunque mamarracha como la que más, es un genio y Marc solo un overtattoed con mucho carisma.

Así que siguiendo esta premisa, ¿que hizo? Sacarse un novio Escort. Con tarifa en su página web y todo....

Su historia la verdad es que no es divertida ni mucho menos. Iban a todas las fiestas, saraos, presentaciones retroalimentándose en su mamarrachez. Para mi sin duda lo mejor de esta pareja fue cuando el escort hizo esto:

Si, tatuarse el nombre de su dueño. Marc estaría encantado porque además de hinchar un poco mas su ego, he's got a thing for tatoos. Su último novio también tenía más de un adorno epidérmico.

Vivan los Toy Boy!!!!